Nieves y Marlon, dos de los jóvenes de nuestra Diócesis que asistieron al XII Encuentro Misionero de Jóvenes nos dejan su testimonio.
Nieves y Marlon comparten con nosotros cómo han vivido el Encuentro de Jóvenes de este año.
TESTIMONIOS:
¿Dónde está tu hermano?.... esta
pregunta convocó el pasado fin de semana a jóvenes con inquietud misionera. La
hermana Paciencia Melgar, nos ayudó a responder con su testimonio. Ella
enferma de ébola supo aceptar la enfermedad y todas las contrariedades que
fueron surgiendo, siempre con confianza plena en Dios “Mi hermano, dice ella, es todo mundo, no importa
la raza, no importa el lugar, no tiene barreras ni fronteras”. Nosotros
sólo tenemos que decirle, “hermano entra, aquí está tu hermano”.
Un testimonio ejemplar, que nos apeló a
cambiar el corazón “nuestro mundo
necesita una vacuna para sanar la indiferencia, nuestro mundo necesita de
nosotros para cambiar, necesitamos gente buena para salvar nuestro mundo”.
Este testimonio junto al del resto de
los misioneros con los que tuve la oportunidad de hablar pone de manifiesto que
la misión cambia el corazón, tanto para los jóvenes que se acercan
al mundo de la misión durante los meses de verano, como para los misioneros que
han entregado su vida por otros hermanos, por anunciar el Evangelio en
cualquier lugar del mundo.
Nieves Escribano
Para mí este Encuentro Misionero de Jóvenes ha sido una bendición ya que he podido ver a Dios en todo momento,
sobre todo al convivir y compartir, he podido llenarme de su amor a través de
los testimonios como el de la hermana Paciencia que me invitaba a cuidar más de
mis hermanos y sobre todo a olvidarme de mí y darme a los demás. Hoy puedo
decir que es una experiencia inolvidable porque Jesús está en los más pequeños, está
en mis hermanos.
Marlon