La hermana Mercedes nos cuenta su visita a enfermas misioneras en Alcalá y la impresión que le produjo la fortaleza de su fe
Soy las hermana Mercedes, Sierva del
Hogar de la Madre, llevo en misiones 8 años, todos ellos en Ecuador, tres años
en Manabí y el resto en Guayaquil. Nuestro apostolado es principalmente con
niños, jóvenes y familias, a través de clases de religión, catequesis, charlas
de formación, retiros, convivencias… el Señor nos permite llegar a las almas de
muchas personas sedientas de Dios, he podido palpar como su misericordia
irrumpía en muchas vidas y esto producía un cambio total y de repente han
encontrado el sentido, la alegría… esta es una de las gracias mayores que un
misionero recibe, ver en primera fila la actuación de Dios en las almas.
Estoy de paso en Alcalá y he tenido la
suerte de visitar a varias “enfermas misioneras” en su domicilios, pudiendo animarlas
a ofrecer parte de tanto sufrimiento por nuestras misiones en Ecuador, les
contaba como es nuestro trabajo allí, las dificultades que encontramos, las
alegrías… Estas personas mayores, sufriendo de muchos dolores y también de
soledad me han animado también a mí al ver la aceptación de su cruz, el no
revelarse, el gozo en medio del dolor… han sido todo un ejemplo de personas
fuertes en la fe. A cada una de ellas les he podido encomendar una intención
particular. También me ha impresionado mucho el chico voluntario de pastoral de
los enfermos que nos ha acompañado a lo largo de toda la mañana, estaba lleno
de Dios. Él las visita dos veces por semana, se notaba que no era un extraño para
ellas, le conocían y querían mucho.
Quiero por último
agradecer esta iniciativa de los enfermos misioneros, me voy con la certeza de
que personas muy agradables a Dios me van a
acompañar con sus oraciones. Todos formamos parte de la misma Iglesia,
contribuyendo con nuestro pobre trabajo en la evangelización, unos con sus
sufrimientos, otros con la entrega de nuestras vidas yendo, en nombre de Dios,
hasta los confines del mundo. ¡Viva la Iglesia! Viva Jesús que es el inicio y
final de todo lo que hacemos.
Hna. Mercedes María de Jesús. SHM.